La charla "Cine y pintura", dirigida por el cineasta alavés Aitor López de Aberásturi y programada ayer en el espacio cultural Zas Kultur, no solo buscaba explorar la conexión entre el cine y la pintura, sino también indagar en la duradera atracción histórica que el cine ha sentido por el mundo de la pintura y el arte.
La pintura, como expresión visual estática, ha representado momentos, emociones y narrativas a lo largo de la historia en varios soportes planos. En contraste, el cine se presenta como una narrativa en movimiento que utiliza la luz y el sonido para contar historias. ¿Qué motivó al cine a buscar inspiración en la pintura? Es evidente que la pintura existía mucho antes que el cine.
Dos ejemplos ilustrativos son "Basquiat" (1996), dirigida por Julian Schnabel, que explora el ascenso de Jean-Michel Basquiat en el arte urbano, y "Medianoche en París" (2011), película de Woody Allen, donde el protagonista viaja en el tiempo y se encuentra con artistas icónicos.
Durante la interacción de Aitor con el público presente en Zas, el cineasta llevaba a cabo un análisis detallado sobre cómo a lo largo de la historia del cine, desde sus inicios hasta la actualidad, este ha encontrado en la pintura una constante fuente de estímulos visuales y narrativos. La exploración de obras de maestros como Rembrandt, Caravaggio o Turner desvelaba cómo el cine ha incorporado elementos de la pintura para enriquecer su propio lenguaje visual, manifestándose en la obra de directores como Murnau, Weir, SKubrick o Kurosawa.
La charla también profundizaba en la atemporalidad de las temáticas artísticas y en cómo el cine ha utilizado la pintura para explorar dimensiones emocionales y filosóficas. Desde evocar mundos surrealistas hasta recrear obras históricas en la pantalla, este siempre ha demostrado su habilidad para traducir la esencia pictórica a una narrativa cinematográfica.
Además, se abordaba cómo cineastas contemporáneos han interpretado movimientos artísticos, adaptando la estética de la pintura moderna y contemporánea al lenguaje cinematográfico. Esta relación simbiótica entre cine y pintura, más allá de ser un simple ejercicio estilístico, revela cómo estas formas de expresión se nutren mutuamente, generando un diálogo constante entre el arte estático y el arte en movimiento. La conferencia tuvo como objetivo descifrar los motivos que han sustentado este diálogo perenne entre dos medios artísticos en apariencia divergentes, arrojando luz sobre la perdurable fascinación del cine por la riqueza del arte pictórico.
Según expresaba el cineasta Bergman, "El cine es un lenguaje en sí mismo. No deberíamos pasar por alto el hecho de que, a lo largo de su evolución, ha sido profundamente influenciado por todas las demás formas de arte". En este contexto, la charla se erigía como una oportunidad para explorar el diálogo entre dos formas de arte que, a pesar de sus diferencias, se entrelazan de manera orgánica en la gran pantalla.